Mi propio IRONMAN

Estar en pareja es un trabajo y como en todo trabajo, hay cosas buenas y cosas no tan buenas y como en todo trabajo, también hay una recompensa. La clave del éxito de una pareja esta en la mente, justo como en un IRONMAN.

Jamás hice un IRONMAN, por lo que si alguien que vivió la experiencia quiere contar su visión, adelante. Desde mis zapatos, por los cientos de videos de competencias que he visto y por las que he presenciado puedo decir con seguridad que las personas que no son capaces de controlar su mente, de darle ordenes y de calmarla, no terminan la competencia.

Como en las relaciones, hacer un IRONMAN Consta de varias etapas.

Etapa 1: La Previa.

Antes de empezar la competencia te sentís nervioso, preparas todo con lujos y detalles y repasas check lists para que no se te escape ningún detalle. Sos precavido para no dar un paso en falso y que todo salga mal. Estas nervioso, ansioso pero contento y emocionado. La competencia pasa a ser tu prioridad por sobre todas las cosas.

Llega el día esperado, sabes que todo va a salir bien  por que controlas tu mente, te auto-motivas, auto-tranquilizas, auto-TODO para estar lo mas calmo posible, aunque en el fondo dudas por que sabes que no todo depende de nosotros, que hay cosas que no controlamos...dormimos poco, nos desvelamos pero ahi estamos... rezando, esperando, ilusionando.

Todo eso sentí durante nuestro viaje a Acapulco con Juan en donde empezamos formalmente a estar juntos. Ya habían pasado como 4 años desde la última propuesta de noviazgo que recibí y estaba nerviosa, por que sabía que iba a pasar. Fuimos a cenar y ya no sabía que tema sacar para “patear” la situación que sabía que iba a llegar…no por que no quería que llegue, claro que quería…si no por la mezcla sentimental de la que hablo arriba. Me mostré tranquila, pero mi mente iba a mil… ¿De verdad voy a ponerme de novia con un Mexicano? ¿Y si quiero volver a Buenos Aires? ¿Se lo digo?...etc, etc, etc.  

Etapa 2: Nado

Se escucha el cañón, te tiemblan las piernas, te desconcentras por un segundo por la adrenalina que te invade, miedo. Ya estas, no podes escaparte, no podes mas que avanzar. Y lo haces. Con miedo pero con entusiasmo y  mucha energía...así como empiezan las relaciones... cuando todo es emoción.  Acá si, no hay mente, no hay cuerpo, solo emoción. Vas a tu ritmo, tranquilo y sin pensar...pero vas. Todo esta bien, todo es normal. Es el principio, y estás tranquilo.

Salís del agua y es cuando todo empieza a sentirse real y cuando volves a dudar y tu cabeza vuelve a llenarse de preguntas ¿Podré terminarlo? Voy bien, espero no me de un calambre, ¿Me alcanzará la comida? Espero no haya viento…

Al principio de una relación (mis experiencias) todo es emoción, justo como cuando empezas un IRONMAN, empezas a construir una base sólida a base de amor: emoción, emoción, emoción. Los primeros meses tu relación empieza a sentirse real y es cuando también empezas a preguntarte todo: ¿será el hombre de mi vida? ¿Podría ser el padre de mis hijos? ¿tolerare esto o aquello toda la vida?...

Etapa 3: La Bici.

La mayoría llega a esta instancia, la parte más larga, donde empezas a dudar de si podrás lograrlo. Le pones garra y pedaleas, y seguís pedaleando y frenas y volves a pedalear. Y otra vez tu mente te pone a prueba. Y otra vez dudas. Las piedras del camino cada vez son más grandes y más molestas, y lo que antes veías como un tope ahora lo vez como una colina y sabes que después va a convertirse en una montaña...otra vez controlas tu mente y pensas ¿estoy dispuesto a seguir? ¿Voy a soportarlo toda la competencia? Pero esta vez no es tu mente la que responde, es tu corazón.  Entonces sonreís, y seguís.

Mismo una relación, cuando pasas a la siguiente etapa: la convivencia. Etapa en donde empieza a sentirse la rutina, en donde ves el resto de tu vida todos los días, en donde aprendes cosas tuyas que ni siquiera sabías o te imaginabas, donde empezas a darte una idea mas sólida de si es o no es. Y como en la bici, llega la primera crisis fuerte… ¿Toda la vida? Entonces apretas los dientes, cerras los puños y miras para adelante...y vas, y controlas tu mente, y alejas tus emociones para dar lugar a la razón, por que no podes equivocarte…es el resto de tu vida…y también como en la Bici, finalmente te das cuenta que la respuesta final no te la va a dar tu mente, por que ya te la dio tu corazón. Entonces sonreís, y seguís.

La convivencia es una de las experiencias mas intensas que tuve en mi vida. Al principio estaba muy emocionada, comprando los muebles, eligiendo juntos cada detalle para nuestra casita. Sin duda es una etapa que fortalece a la pareja…aprendes a ajustarte el cinturón para poder proyectar un futuro con otra persona. Wow. Después viene el aprender cosas tuyas y sobre todo de la otra persona que no sabías que tenia. Muchos de esos aprendizajes son pavadas, pero pavadas con las que tenes que vivir el resto de tu vida…y que las vas a tener que llevar con la razón.

Etapa 4: El Maratón.

Sin duda la parte mas difícil, donde te queda el mínimo de emoción, la emoción que vas a necesitar para los últimos 5 kilómetros, entonces corres primero con lo poco que te queda de cuerpo y después usas la mente, la mente que tenes controlada, y sabes que tenes que tenerla así para terminar, porque sabes que sin tu mente, tu cuerpo no aguanta y sabes que te faltan muchos tropezones y que vas a necesitar mucho apoyo.

Y empieza la rutina… ojo! En esta parte no quiero decir que no sienta emoción…por el contrario, cada día estoy mas enamorada. Aca me refiero un poco mas a la convivencia, a que un hombre y una mujer vivan juntos. Y si, en esta parte si pienso que es importante vivir con emoción, pero que hay que ser muy racional...sabes que hay cosas que no estas dispuesta a soportar con la emoción, que reventarías..entonces elegís la razón, para aceptar y entender de que él no sos vos, y que van a haber roces por los cuales antes de vivir juntos jamás pensaste que discutirías…pero que decidís discutir…para darle un aire a la relación…como los terremotos, es bueno que haya un temblor de vez en cuando para que la tierra vaya liberando energía y no te agarre un terremoto fuerte de una vez.

Etapa 5: El veredicto

Practicar un deporte hace que, como las relaciones, tus emociones estén expuestas, y hace que tu mente se discipline y que sufras y te vuelvas a levantar para demostrar que, una vez más y a pesar de todo, es lo que queres para el resto de tu vida.

Terminarás de forma exitosa? Quien sabe…pero ahí vamos. Racionales y emocionales. Hasta el final.

Un viaje de IDA. Mis primeros 10K

Me anote en mis primeros 10k, a las semanas una amiga me dice: “Corremos la de princesas? Son 10k!”…Ok ahora estaba anotada en 2 carreras de 10k, y lo que me di cuenta unas semanas después es que entre las dos carreras habían 6 días de diferencia. Pase de ser una ´Sedentaria´ a estar anotada en dos carreras de 10k. A muchos puede parecerle una exageración o muy poco…para mí era mucho, increíble.

Con el Sapo

Cuando empezas a correr tus primeros kilómetros y terminas mal, y no te gusta, y te duele, y te quejas, y no entendes, la gente te dice: “Es normal”, “Ya te va a empezar a gustar”, “Date tiempo…es algo que se adquiere”, “no aflojes”, etc, etc, etc …en ese momento queres ser la única persona existente del planeta.  Tranqui, después de unos meses lo entendes todo.

No me gusta correr.  No me gusta entrenar. No me gusta.

El entrenamiento para los primeros 10k fue una pesadilla. Empecé trabajo nuevo que no me permite entrenar entre semana…salvo que me despierte a las 5am…que NO va a pasar, por lo que me quedaban los fines de semana (3). El primer fin de semana de entrenamiento, Juan me llevo a Reforma…corrimos despacio y logro que corra mis primeros 7km …en 1 hora…pero mis primeros 7km al fin. Correr despacio hizo que llegue a terminarlos y bien, eso me dio confianza: “En el peor de los casos, en la carrera voy despacio…que llego, llego.”  El segundo fin de semana corrimos 9km…no me sentí tan bien como en mis primeros 7km…en la mitad, frenamos como 15 minutos, me sentí mareada…jamás iba a lograrlo. El tercer fin de semana y el ultimo antes de mi carrera salimos a correr…que mal me fue! Corrí 3km en 30 minutos…no podía, mis piernas estaban duras, no tenía ganas, quería quedame en casa…y así me fue. Listo. Mis primeros 10km iban a ser un fracaso, no había otra opción. 3km en 30 minutos? Qué horror.

KM 6.

 Llego el día de la carrera. Mis primeros 10k. Uff, que nervios. Jamás pensé que iba a estar tan nerviosa…por una carrera? Jaja, no. Pero si. Nos formamos con mi amiga (Ella ya experta corredora) y empecé a pensar: “No llego ni ahí”, “Me van a doler las rodillas”, “no quiero correr”, “por qué estoy haciendo esto?”, “no hay chances de que llegue”.  En fin, ya estaba ahí, no había nada que hacer…así que corrí.  Juan me esperaba al arranque para correr conmigo, llevó m&m por si me mareaba, tenia gatorade, todo…como si fuera a correr una maratón, no importa…me daba confianza.

Consejo: No intentes correr tus primeros 10k sin música…la música hace que te olvides que corres.

Corrí, 1, 2, 3, 4, 5…me iba cansando…6,7…en lo que una persona que estaba gritando alentando a la gente grita: “Vamos! …a la princesa!...y al sapo!”…me motive…y así es como llegue al 7.800 cuando uno de los organizadores  grita: “Vamos, ya llegaron al km8! Faltan 2!” me volví a motivar…después de 200 metros veo: km8…Que??? Cómo??? No íbamos por el 8 hace 200 metros?...Cada energía que te queda cuenta…cada 100 metros cuenta…todo cuenta!! Empecé a putear,  hasta llegar al km9…y ahí me volví a motivar…solo faltaba 1!! No había forma de que no termine…así que termine. En 1:13. Ahora sí. Mi primera medalla de 10k. Ahora sí. Soy corredora.  

En la Meta. 

 Ahora me anote en una carrera de 12km…de nuevo, no me gusta correr…pero igual me anote…no se por que…es un viaje de ida?

Somos una pareja deportista.

Ay, si hubieran estado ahí!

En la escalera...muriendo despacito.  

Nos anotamos juntos a un gimnasio por un mes, Juan se comprometió a entrenarme para mi carrera de 10k el primer fin de semana de agosto. El sábado estrenamos la membresía muy a mi pesar…(Sábado de cruda siempre fue sinónimo de: Me quedo todo el día en la cama viendo películas…algo que Juan NO puede entender, pero este tema es una conversación aparte) al principio me entusiasme…nunca había ido a un gimnasio de calidad, siempre había ido al gimnasio de 2 por 2 de la esquina (entiéndase por siempre: dos o tres semanas).

Entre y “WOW, está buenísimo”…me sentí una atleta profesional. Además de eso y para no perder la costumbre…me queje por no haber llevado mi secador de pelo (después teníamos una comida), a lo que Juan me contesta: Hay en los vestidores, que nunca has ido a un Gimnasio?...obvio le cambie de tema, que papelón!, me reí por dentro.

Salí del vestuario divertida, inexperta, con mucha energía y por supuesto, con mi outfit de deportista profesional! Juan me reclamó que no traía la toallita….”Toallita, que toallita? Hay que pagar? De que hablas? No, no la necesito, yo no sudo…”, me hice la canchera….era obligatoria. Otro papelón.

Rogando PIEDAD!

Y nos subimos a la caminadora nomas, con un objetivo de correr 4km, me puse el ipod y empecé a correr, Juan corriendo al lado mío. Un rey.

A los 2km me moría, ya no podía correr más, así que Juan (Mi Personal Trainer) me pidió que aguante hasta el minuto 20, eso hice y bastante bien. Igual…fail. Baje cansada pero normal…fuimos a las escaleras, y ahí si…vi la muerte. Empecé a criticar a Juan, a putearlo por hacerme sufrir así…yo seguía subiendo las escaleras, él se reía y me motivaba. – Ya aprendió que si me quejo, siento que duele menos, así que se la banca…todo sea por tener una novia con cuerpazo, no? – Así, entre el sufrimiento, logré completar los 10 eternos minutos. Me baje y las piernas no me respondían, literal. Ubican cuando Bridget Jones se baja de la bici? Bueno.  –Recomiendo verla: http://www.youtube.com/watch?v=Dd3qjpIuuoQ -

3er ejercicio: bicicleta…Ja! Pan comido. El pedía 20

En la bici...con la "Fuerza floja" viendo tele.

minutos, yo 10…negociamos 15. Me subí a la Bici y empecé a pedalear...al minuto 10 Juan me mira y me dice: Estas muy bien…como puede ser? Subile a la fuerza, moví la perilla y ahí sí, morí de nuevo. Los últimos 5 minutos fueron terribles, cada vez que Juan volteaba, aflojaba un poco la fuerza…es mentirme a mí misma? Que me importa…mis piernas se prendían fuego. Al minuto 15 vi la luz, frene y fui feliz…vi una colchoneta y no dude un instante en echarme…como si no hubiera dormido en siglos, disfrute esos segundos a pleno…hasta que Juan me llamo a estirar.  

Nuevamente en el vestuario y con muchas expectativas para entrar al vapor…me encontré con otras mujeres, desnudas, todas desnudas. No puedo con eso…no sé qué me habrá pasado de chica, es algo que me da mucho pudor….no te conozco, porque voy a exponer mi cuerpazo así? ….me quede con las ganas…

En la colchoneta...descansando. 

Nos volvimos a encontrar con Juan, él se reía por anticipado del dolor que iba a sentir al otro día: “Es un dolor lindo que solo se quita con más ejercicio” pfff…por favor que el tiempo no pase…En fin, con el cuerpo cansado y el corazón inflado nos fuimos divertidos, con nuestra nueva experiencia… felices. 

Un paso adelante.

Vivir las competencias de Juan es muy emocionante: nervios, felicidad, tristeza, miedo, excitación, adrenalina, todo. Obviamente esas emociones producen un cierto ¨cambio¨ en las personas, por lo menos a mí me las produjeron. Cada vez que voy a verlo a una competencia me dan ganas de competir, de correr, es una experiencia que recomiendo a todos, un ambiente increíble, familiar, sano, feliz.  Ahora…que me guste no significa que sea una obsesiva, no voy a despertarme a las 5:30AM para entrenar y todavía no sacrifico programas por deporte. La clave está en encontrar el equilibrio.

Corriendo (muriendo después de la subida)
en Mazatlan

Hay muchas cosas que cambiaron en mi vida por estar al lado de un IRONMAN, saben? Los viernes nos acostamos temprano…los sábados nos acostamos temprano…los domingos nos despertamos temprano…y así  ja..unas cosas por otras. Descubrí que las cosas hay que querer hacerlas por uno…para poder después hacerlas por los demás…así no convertís tu vida en una queja.

Algo nuevo...el domingo nos despertamos con Juan y fuimos a correr juntos al Zócalo, es increíble compartir un momento así…está de más decir que nunca lo había hecho pero es un programa que se lo recomiendo a todos….pobre, correr conmigo es un bajón igual, porque no puedo hablar…hablar o correr, las dos no, me muero. Pero igual la pasamos increíble. Conoces la ciudad desde un punto de vista distinto, miras, turisteas, paseas, pero con tranquilidad.  Cosas simples que enamoran.

Mi MEGA desayuno

Otra situación nueva: Hace unas semanas fuimos a una boda a Mazatlan...tuve que dejar mi secador de pelo para poder llevar la ropa de deportes de Juan...entienden lo que eso significa? Cuando nos despertamos al día siguiente me dice: "Vamos a correr", a lo que le conteste que no, por que (bastante consciente) deje mi ropa de deporte en México, ademas estaba listisima para ir directo a la playa (mi pasatiempo preferido)...saben que la obsesión no tiene limites? Juan había llevado mi ropa escondida...un desubicado; decidí respirar profundo...era matar o morir. Lo bueno fue que cuando terminamos de correr (5k - con una subida heavy) me comí un desayuno de campeones...como si fuera flaca viste? Pero bueno, eso es lo bueno que tenemos los novatos...la excusa. (Puedo comer lo que quiera...no viste que acabo de correr? Ja, quemas 200 calorías e ingerís 1000....típico.) 

En fin...las parejas ideales y perfectas no existen…solo tenes que construir para que tu relación sea perfecta para vos con sus cosas malas …y tratando de esas cosas malas no sean tan malas. Y asi, cada uno forma su propia pareja perfecta. Aprendí también que no solo es cuerpo, si no mente y corazón…

Nuestra simple y compleja pareja perfecta.

Hoy estoy anotada en  3 carreras:

                -Carrera Monstruosa de Disney: 5K el domingo 30 de Junio

                -Carrera Princesas RUN: 10k el domingo 4 de agosto

                -Carrera Total Running: 10k el domingo 11 de agosto

Como ven?

Yo no sé si algún día llegaré a ser triatleta, a correr una maratón, o si me quedo en los 10k (el primer paso?)….lo único que sé, es que es una vida difícil, pero que recompensa. Y recompensa muy bien :)

Nuestro primer IRONMAN. Todo se resume en WOW.

Hace algunos meses me llamo mi mamá de Buenos Aires para confirmar sus fechas de visita, venia del 2 al 18 de mayo …en la emoción por la noticia, le di el ok y saco sus pasajes. Después de eso, se me rompió el corazón al ver la cara de decepción de Juan: “Pero el 18 es el IRONMAN de Texas, no vas a venir?”, y desde entonces, cada vez que tenía oportunidad sacaba el tema a la luz pinchándome un poquito: “Fíjate si podes hacer algo”, “tus papas no pueden cambiar el pasaje?” “Y si le decís a tu mama que venga contigo?”, “Es importante que vengas”, etc, etc, etc.  Cuando no pude soportar más pinchazos, reaccioné, no podía faltar en un momento tan importante para él, para lo que trabajó (trabajamos?) durante 6 meses…por eso saque el pasaje a Texas para viajar el mismo 18 de Mayo, pero a él nunca se lo dije.

Los días previos al IRONMAN fueron muy duros, para Juan, para mí y para la relación. Nos enfriamos, nos alejamos, el con sus cosas, yo con las mías…raro. A todo esto le sumo los nervios que yo tenía por qué sabía que iba a ir a verlo de sorpresa: Le gustará la sorpresa? Voy a llegar para el momento de la Bici…y si cuando me ve se cae de la bici? Y si hago que frene mucho y se enoja conmigo? Uff, un estrés. Me hice una remera para apoyarlo (FAN NUM.1)

Yo con mi remera de FAN

 Juan viajo a Texas el  14 de mayo, en esos días que estuvimos separados yo le preguntaba por el clima, la ropa, sus horarios, teléfonos, etc. Quería saber todo! Hablamos de que aunque yo no iba a estar físicamente, mi mente y alma iban a estar con él, acompañándolo…le dije que habíamos comprado Jugo y medialunas con mi mama para verlo temprano en vivo por internet, le encantó la idea!

La noche del 17 de Mayo no dormí nada, a las 6 cuando sonó el despertador, estaba casi en la puerta de mi casa esperando a que el taxi me pasara a buscar para ir al aeropuerto….twitteando, chateando, tratando de hablar con cualquiera que este despierto…ya no podía esconder mis nervios y mi felicidad, y lo bueno era que Juan ya estaba por empezar su competencia, por lo que sin su teléfono a mano, no había forma de que se enterara de esto. Llegue al aeropuerto 3.30 horas antes de que salga mi vuelo, fueron las horas más largas de mi vida, trataba de ver en vivo la transmisión pero en el aeropuerto no había buena señal, camine por todos lados haciendo la parabólica para buscar un poco de mejor señal…no hubo caso. Una vez que me subí al avión, me puse  a hablar con el señor que se sentó al lado mío, le conté todo…una mujer de atrás escucho y se sumó a la conversación. Mis nervios estaban a punto de hacer

Yo vestida de FAN en el avión

que colapse…no podía parar de hablar. El vuelo llego 25 minutos antes de lo estimado…y yo había tomado la decisión de sorprenderlo en la corrida y no en la bici (por las razones que explico arriba)…por lo que me tomé una camioneta que iba a pasar por dos terminales a buscar otra gente y nos iba a llevar a The Woodlands, sede del evento. El chofer me dijo que íbamos a llegar en aproximadamente 25 minutos, que si no había problema en parar a cargar gas, y yo, como no quería llegar a la bici le dije que no, que no tenía ningún apuro. Una hora y media después, estaba al borde del ataque de nervios. Me puse a charlar con unos mexicanos que se subieron a la camioneta y en un momento me dicen: “Mirá, ahí hay unos corredores” y pasaron 5 corredores entre los arboles…uno de ellos: Juan. Me empezó a temblar el cuerpo, desesperadamente le pedí al chofer de la camioneta que frene el auto, que yo me bajaba ahí…obviamente no me bajo, debíamos llegar a un estacionamiento o lugar seguro para parar el auto. Me empezó a dar claustrofobia, la camioneta dio la vuelta y freno. Me baje corriendo y pregunte a la gente donde podía ver a los corredores pasar la mayor cantidad de veces, me lo indicaron y ahí fui. Al fin llegué.

Quemadura.

Me instalé en un lugar donde había un grupo de gente muy buena onda, todos dándole animo a todos, súper contentos y en un ambiente familiar muy alegre y sano. Yo pálida…había guardado el secreto por meses y ya estaba ahí…me doy vuelta para dejar mi mochila en el piso y ahí estaba del otro lado del lago. Grité, no me salió la voz, me empezó a temblar el cuerpo, sentí que me bajaba la presión, Juan estaba pasando: era el momento de gritar!! Trate de relajarme y me salió la voz…Juan miro para donde yo estaba durante un segundo y retomo su corrida, yo no entendía por qué no había frenado…le volví a gritar, volvió a mirar y frenó, empezó a preguntarme cosas desde el otro lado del lago: Que haces aquí? Como llegaste? Que haces aquí? Estas aquí? Que haces? Cuando viniste? Que haces aquí? No daba crédito a lo que veía...a mí no me salían las palabras, estaba débil, mucha emoción. Le dije que siguiera corriendo, y ahora me tocaba esperar 20 minutos para que pase por donde yo estaba, jamás había estado tan nerviosa en toda mi vida. Lo vi venir, yo no podía acercarme a él porque mis piernas no respondían, me quede quieta mientras el corría hacia donde yo estaba…sentía que si perdía concentración en la fuerza que yo hacía por mantenerme parada me iba a desmayar….al fin llego, me dio el segundo mejor beso del mundo, me abrazo y me morí de amor. La gente de nuestro alrededor empezó a gritar, nos emocionamos mucho; se me calmaron los nervios y me volvió el alma al cuerpo. 

Él tenía que seguir su trayecto, pero como me hacía preguntas empecé a correr con él y le explique…el me conto que venía bien mal, que en la transición de la Bici a la Corrida se había quemado los pies con el asfalto y los sentía muy mal y que la primera vez que volteo a verme pensó que estaba alucinando, que no podía ser que me esté viendo si yo no había ido a Texas, me dio miedo, pero le dije que no parara…que todo el esfuerzo que había hecho durante los últimos meses tenía que demostrarlo ahí mismo, que era el día en el que tenía que dejar todo, el día en el que se iba a reflejar toda esa pasión. Siguió corriendo, le grité todas las veces que paso, el me abrazo todas las veces que paso…hasta que la última me dice: “En 5 minutos llego a la final”, otra vez nervios. Fui corriendo a la final, prepare la cámara, y lo esperé, en primera fila, al lado de la meta. Lo volví a ver, corrió hacia donde yo estaba y me dio el mejor beso del mundo, nos emocionamos y lloramos. Una vez que paso la meta me fue a abrazar y fue el mejor momento, el mejor abrazo que recibí, el mejor sentimiento, morimos de amor. 

Juan en la meta.

Yo estaba feliz por la decisión que había tomado de no perderme ese momento, que importante es ir a verlo competir para entender todo lo que hace, él estaba feliz porque estaba ahí para él. WOW.

Lo que tengo que soportar...

Voy a hacer una lista de los detalles y no detalles de lo que tengo que soportar al ser la novia de un IRONMAN. Esta lista seguramente crezca a medida que vaya pasando el tiempo, carreras, triatlones, competencias, etc. y dependerá también de como vayamos trabajando la paciencia -es un poco una lista de descargue emocional-. En fin, empecemos con lo que fui descubriendo en estos 5 meses de noviazgo...

1-. Prioridades: señoras y señores, es el 'ítem' más duro que voy a numerar ( después del de las uñas) somos y seremos la prioridad 2 de sus vidas. Siempre. No significa que nos quieran menos que los no deportistas por tener esta prioridad, solo que para ser felices y poder tener una vida, ellos necesitan el deporte. Es así. 

2-.Comentarios: "Todos los que no hacen deporte, son unos huevones." Gordi, estoy acá y no, yo no hago deporte.  

3-. Comidas: Juan me funde, lo admito... Come como animal, pero no me preocupa eso, si fuera necesario, pido un préstamo al banco para comprarle la comida pero Dios... No me hagas cocinar 3 veces por día para un batallón, no lo hagas! 

4-. Uñas: Hay bastantes cosas que me molestan de un hombre, como a todas... Pero no hay nada que me moleste más que un hombre con uñas largas. Habiendo dicho eso: el otro día Juan se sacó las zapatillas y se las vi... Las garras, casi me infarto! Me vio la cara y se dio cuenta, y así como si nada suelta un "Qué?, no me puedo cortar las uñas hasta el fin de semana siguiente -5 días- porque me las tengo que cortar 15 días antes del IRONMAN, así si me crece mal una, tengo tiempo a que me crezca bien pero no paso el suficiente para que crezcan demasiado". Matame. 

5-. Viajes: despertarse 1 hora antes para ayudarlo con el Rack y subir la bici al auto, día anterior: 45 minutos de baño porque tiene que rasurarse, ir a cenar pero temprano porque al otro día hay que madrugar para entrenar, madrugar para entrenar, bancarse las consecuencias de su alimentación en las competencias, etc.

6-. Televisión: La pelea que tienen todas las parejas del mundo, es una risa. Además de ser un IRONMAN, es fanático de todos los deportes…TODOS. Mira Golf, Tenis, Natación, Rugby, Baseball, Nado sincronizado, Ping Pong, etc, etc, etc.

7-. Compras: Él me dice: “Necesito comprar unos tenis porque los que tengo ya tienen más de 500km” . WHAT? Tenes 15 pares!!! Casi se me cae la cara, yo me compro un vestido y unas playeritas y soy compradora compulsiva? Para mi cumpleaños recibí un reloj GARMIN, para navidad unos tenis para correr, claro…ya lo quiero ver cuando le regale un DVD de Los Miserables (Yo FAN)

Algun@ se siente identificado? Tengo que hacerme triatleta? O que?
Continuara…(Seguro que si...)

Ultimas semanas para el IRONMAN = Crisis

La mujer que es tan buena en la práctica como en la teoría en cuestión de hombres…que tire la primera piedra.

Y llego el entrenamiento previo al IRONMAN, y como era de esperarse, y como Juan y yo lo anticipamos la primer semana de nuestro noviazgo llego acompañado de nuestra primera crisis. Fue de esas típicas crisis que llegan de golpe, sin avisar…pero cuando te escuchas discutiendo, argumentas con el defecto más viejo y mínimo que encuentres, te acordas de todo…te agarras de lo que sea, todo sirve. Esas crisis de las que cuando te queres dar cuenta no te acordas ni la razón de por qué te peleas, pero de mas esta decir que no podes aflojar a medio camino. 

A lo largo de los años aprendí que las mujeres somos las mejores dando consejos, hablando, escuchando… a nuestras hermanas, amigas, amigos, a quien sea. Analizamos la situación, pensamos en frio, somos racionales, en fin…muy inteligentes y capaces de llevar a cabo cualquier situación que se nos presente. Ahora… Por qué razón existe ese cortocircuito entre nuestra mente y nuestro cuerpo cuando ese consejo que diste lo tenes que aplicar a tu vida? (o pelea, o discusión, etc.). Por qué razón dejamos que la histeria nos domine y perdemos todo tipo de control?  

Opino que soy una mujer muy emocional, y me gusta mucho el ´debate´, ultimamente trato de ser pacifica…pero si buscas, buscas, y no dejas de buscar…me encontras, como a cualquier mujer. Claro ejemplo: a los dos meses de novios ya me había caído dos veces al inodoro, seguido por la insoportable discusión de por qué razón no puede volver a dejar la tabla del baño donde estaba. (y ni siquiera vivimos juntos). Entonces, hombres: NO busquen lo que no quieren encontrar. Si nos quieren pacíficas, manténgannos pacíficas. Sobre todo si siempre vamos a ser la prioridad N°2 de sus vidas...disimulen, no?

Las mujeres solemos estar al borde de un ataque de nervios el 50% de nuestro tiempo en la relación, lo que el hombre no sabe (o aprovecha) es que es muy simple llevar ese 50% a %0. Entiendo soy una mujer con poca paciencia, pero si hoy me pedís perdón por una razón, mañana no vuelvas a cometer esa razón…están todos de acuerdo? Pero eso es causa de otra Crisis con Juan, así que mejor la cortamos aca…

Primer Medio IRONMAN.

Hace unos fines de semana fuimos a Veracruz, Juan se anotó en el Triatlón de largas distancias “Fuga isla de sacrificios” (Medio IRONMAN)  a modo de entrenamiento para su próximo IRONMAN, el 18 de Mayo en Texas.

Primeros sacrificios de MIS programas, desveladas, ansiedad, mal humor, quejas…en fin, empezó el resto de mi vida.

Obviamente yo era su porra, la única…me divertía la idea de verlo, pero son 6 horas, calor, humedad, pelo, pegote, soledad…pero para no pensar en negativo me aferre a la idea de conocer Veracruz y le puse buena cara. Partimos el sábado para regresar el domingo (5 horas de viaje) y no necesite llegar para darme cuenta de que no iba a ser una buena oportunidad para conocer Veracruz. A las 10 teníamos que estar en la cama para despertarnos a las 6, hacer la competencia y volver…para el era super emocionante...para mi? Uff que fiaca, pero no importa, nuevamente tome la decisión de volver a poner buena cara.  

El día de la competencia.Nadada: 1.9 km – Bicicleta: 90 km – Corrida: 21 km

Juan dice que su punto débil es la nadada, que es muy bueno en la bici y corriendo y ahí recupera el tiempo perdido en el mar. Ese día el mar estaba muy picado, había mucha corriente y yo estaba al borde de un ataque de nervios. Quien en sus cabales va a nadar en este mar 1.9 km?, que peligro, que miedo, que estres, que frío  que flojera, que sueño. Sonó el silbato de arranque y se fue nomas… al cabo de 30 minutos empiezan a salir los primeros, con unas espaldas impresionantes, y como Juan me dijo que era malo, estaba tranquila porque Juan iba a llegar en por lo menos, 20 minutos…pero no. Salió del agua antes del pelotón, y ahí empezó mi felicidad. Yo estaba en primera fila, obvio. Y en cuanto paso y me choco la mano me olvide de todo: los sacrificios, las desveladas, la ansiedad…empecé a gritar y a alcanzarlo a la transición, para que, mientras se prepare para la bici (ponerse el casco, tenis, etc.) yo podía hablarle. Efectivamente lo alcance, y le empecé a hablar, el no entendía por qué le hablaba….yo no podía parar, me contó que el mar estaba terrible, yo le dije que lo había hecho muy bien, que si tenía frío  que yo estaba emocionada, que se ponga bien el casco, que si quería tomar agua, que se hidrate, que era uno de los primeros en salir, etc, etc, etc, me sonrió y se fue. Yo creo que no escucho nada de lo que le dije…pero no importaba.

Yo recibiendo a Juan cuando llego a la meta. 

Una vez que arranco en la Bici vi un bloque gigante en el boulevard de la calle, decidí iba a ser el lugar desde donde lo iba ver pasar varias veces y desde arriba. Ahí me instale con otras personas, charlamos un montón, todos me preguntaron que por qué no hacia yo el medio IRONMAN ya que estaba vestida de atleta y tenia puesto mi reloj GARMIN. Yo me reí, el reloj, obvio me lo regalo Juan para mi cumpleaños…y mi outfit me lo fui a comprar después de la primera vez que salí a correr, pensé que si gastaba plata en ropa para correr, iba a tener que salir a correr a fuerza. En fin,  le gritábamos a todos y entonces… lo vi pasar… 10 veces en la bici. Le grite hasta cansarme, dándole ánimo, fuerza y energías. En el momento que va a dejar la Bici para empezar a correr yo no lo podía creer, iba en 3er lugar de toda la competencia! Era la 3er persona en hacer la transición! No sabía a lo que iba….sabía que era bueno, pero 3ro de 750?. Me emocione. Lo veía pasar correr y sabía que iba a llegar 3ro…pero me equivoque.

Me puse a charlar con el fotógrafo y le comente que estaba en los primeros lugares, me dejo pasar al lugar de la meta para recibirlo. Llego el primer puesto….y el segundo: él. Me enamore, otra vez. Emoción. Foto. Nervios. Todo. Ahí mismo, en ese momento , cuando se le quiebra la voz, se me aflojan las piernas. Segundo de la competencia, Primero en su categoría, momento increíble.

En ese momento aprendí que a pesar de que para los dos sea un sacrificio, llega el día en el que sentís que todo el esfuerzo vale la pena, y te olvidas de las quejas, de las desveladas, ansiedad, todo. No me perdería por nada su próxima competencia, verlo así, de nuevo, feliz. 

Sí, quiero esto.

Yo ¿deportista?: El debut.

Durante alguna de nuestras primeras discusiones y charlas sobre cómo íbamos a sobrevivir a esto, para tratar de ser positiva en mi negativismo le pregunte algo como: “Por qué en lugar de decir que te voy a dejar, no haces algo para que me empiece a gustar el deporte?” Pobre…le di la tarea más difícil. Al terminar la frase y antes de que pueda arrepentirme se le iluminaron los ojos, se emocionó como un bebe y acepto con muchísimo gusto el reto.

Su frase era: “Un IRONMAN solo puede casarse con un IRONMAN, de lo contrario….son crónica de una muerte anunciada”.

Yo, distraída saludando a Juan en la carrera. 

Lucho contra esa frase todos los días…tanto lucho, que Juan logró sacarme a correr, a MI!...para que se den una idea de lo poco (en realidad, nada) que tengo que ver con el deporte, cuando mi mama se enteró, se empezó a reír a carcajadas, nadie lo podía creer! Ni yo…Juan me mostraba videos motivadores, de gente como yo que se volvió IRONMAN, etc… La primera vez que lo intentó, me paso a buscar y me dijo: “Dale, hoy corremos 3km!”, se imaginaran mi reacción, jamás en mi vida había corrido ni 500 metros ni se me pasaba por la mente que podría llegar a hacerlo algún día.

El 24 de febrero 2013 Juan se levantó muy emocionado, todo contento…como niño chiquito. Me despertó con tiempo y logro (no sé cómo) sacarme de la cama. Cuando llegamos al lugar de la carrera me puse un poco nerviosa, no estaba lista para pasar ningún papelón…me tranquilice cuando una amiga me dice: “Tranqui, en el peor de los casos, terminamos la carrera en taxi”.  Ese día lo hice, corrí mi primera carrera de 5k. Algunos podrán reírse o pensar que 5 km son un suspiro…para mi fueron 5km eternos, 5km en los que me moría…pero que después de 35:41 minutos, me llenaron de satisfacción. Obviamente, una vez terminada la carrera me fui a recibir mi merecido premio, y no, no hablo de la medalla…hablo de un rico asado. Mi pensamiento novato: “Si corrí 5km, ahora puedo comer lo que sea, lo merezco”, se imaginaran el panzazo que me di….Juan miraba anonadado, y yo? Yo feliz. El otro día leí algo muy cierto: “Si corres 3 km, quemarás aproximadamente 300 calorías, eso no te da derecho a comerte 1000 calorías”, después del asado aprendí.

Hoy estoy buscando la carrera de 10k para inscribirme…Juan dice que voy a poder correr medio maratón antes de que termine el año, yo me río, pero también me reí cuando me dijo que corra 5km… él está muy seguro de que voy a hacerlo. A fin de año les cuento…

Yo, Porrista.

Imagínense a un chiquito antes de su primer día de colegio, con su uniforme preparado, sus útiles ordenados por color y tamaño, todo acomodado de forma perfecta, todo emocionado. Así estaba Juan antes de competir en el Duatlon en noviembre al que me invito. En ese entonces, nosotros salíamos…casual, pero con muchísimo gusto acepté.

Juan me levanto a las 5 de la mañana feliz, y yo? Yo con los ojos entreabiertos y muda. Debo ser una de las personas menos mañaneras del planeta…sumándole que mi hobbie es dormir, todo un tema.

Juan con su Premio

Llegamos al campo donde era la competencia como a las 5.45 de la mañana para que Juan deje su Bici, frío de muerte, sueño y mal humor…pero lo más importante, buena cara. Él debe ser una de las personas más sociables que conozco, habla hasta con las paredes…así que se fue a sociabilizar con otros deportistas…y ahí estaba yo, sin manual…con pantalones, botas altas y sweater de verano, evitando la hipotermia y buscando desesperadamente mi café y mi medialuna para poder empezar mi día, sola.

La competencia empezó a las 7:00 y mi humor ya había empezado a transformarse a raíz de que conseguí mi café. Empezaron todos a correr y me acomodé en las gradas esperando a que vuelva pasar. Obviamente cuando ves a tu chico competir, y ves que es bueno…te derretís. Y ahí mismo paso…me empezó a picar el bichito del amor. Miedo…que iba a hacer yo con un adicto al deporte?. Mejor ni pensarlo…en fin, llego la transición a las bicis junto con mi pánico: velocidad, curvas, asfalto…mala combinación. Me la banque como una reina.  

Todo salió muy bien. Juan salió 2do y me invito al cumpleaños de su papa…a él también le había picado el bichito. 

El hombre es un....BOOMERANG.

El 1 de diciembre 2012 me puse de novia. 

A los 3 meses de noviazgo lo entendí todo. (O creo entenderlo)...los hombres son como BOOMERANGS, necesitan alejarse para volver. Cuanto más lejos los dejes ir, más se acercan después, obviamente, se acercan por un ratito, pero si los quieres de nuevo otro ratito en unos días...necesitas volver a dejarlos ir a lo suyo, y así.... 

Otra forma de decirlo?

Los hombres tienen cajones, cada "cosa" es un cajón: 

Cajón 1: Trabajo

Cajón 2: Familia

Cajón 3: Amigos

Cajón 4: Deporte

Cajón 5: Fútbol (Si, separado del deporte)
Cajón 6: Novia

Ellos van abriendo y cerrando los cajón según corresponda, cuando abren uno cierran otro. En cambio, las mujeres tenemos un cajón enorme, que es nuestra pareja y vamos acomodando las otras “cosas” (Trabajo, familia, amigos, etc) en los huequitos de ese cajón. No tengo claro todavía si es bueno o no tan bueno…pero así somos. Ellos son TODO!

Juan es mi cajón, por lo que está en mi pensamientos todo el tiempo y en todo lo que hago, lo llamo, le escribo, muero de ganas de verlo, siempre. Pero claro, él está ocupado atendiendo otros cajones, por ejemplo: cuando trabaja…trabaja y yo cuando trabajo….trabajo y le hablo por mensaje. Es muy difícil hacer las dos cosas a la vez? Si, ahora lo entiendo…sobre todo cuando uno de sus cajones es una cajonera (gigante)…el deporte. Es como que una hormiga compita con un elefante, no. Entonces lo aprendo a aceptar.

Ser la mujer de un IRONMAN requiere mucha paciencia y tolerancia…yo no las tengo; quiero ser su cajonera, y quiero serlo AHORA. Pero no va a pasar, su pasión es el deporte. Así que vamos a buscar alternativas para llevar esto adelante, consejos?

Obvio ya empezaron las quejas y las victimizaciones pero…si no lo haría, estaría faltando a la ley de la mujer…es nuestra esencia y hasta ahora, nos fue muy bien. No? 

Conoci a un IRONMAN...¿A un qué?

Siempre pensé en tener algo mío, soy una mujer que poco expresa…por lo que se me ocurrió tener un blog, algo simple pero que me permita, además de tener lo mío,expresarme. Una vez que decidí escribir un blog, surgió la siguiente pregunta: De que voy a escribir?, por suerte, conocí a Juan…y ahora sé…

En agosto 2012 conocí a Juan, un chico simple, divertido y extrovertido. Apenas lo vi me llamo la atención y pensé que podía ser un buen prospecto así que hablamos…lo primero que pensé fue: “Uy, se depila! Obvio no es para mí” claro, un pensamiento muy vacío…pero siempre me gustaron los hombres bien machos. Seguimos hablando y me comento que era IRONMAN, no le di importancia…para mí el IRONMAN no era más que una película. Consecuencia de esa charla… empecé a salir con un Juan, el  IRONMAN.

Salir con Juan fue divertido. Siempre teníamos de que hablar, me hacia reír, el tenia sus cosas, yo las mías era muy casual para ambos, cosa que era muy buena para los dos: Él no quería una novia, yo no quería un novio Mexicano. (Soy Argentina: Si me caso con un mexicano me tengo que quedar a vivir en México para siempre? Y si tenemos hijos vamos a tenerlos en Argentina?, muchas preocupaciones que no tenía en mente tener). Mientras salíamos empecé a tratar de entender un poco que es lo que hacía, sus entrenamientos, sus carreras, etc…nunca supe nada de deportes, y en la práctica, siempre fui muy mala, los deportes no son lo mío; jamás se me paso por la mente que una persona podía estar más de 4 horas seguidas haciendo deporte, así de poco sabia.

Cuestión, el tenía sus entrenamientos, sus carreras, sus triatlones, su todo. Había carrera de embolsados? Él se anotaba, en todo, pero de nuevo…todo iba bien, salíamos sin intenciones de nada serio.

Como todo en la vida llega, a nosotros nos llegó, el cariño, el amor, y al principio nos asustamos, pero nos dejamos llevar y nos comprometimos en una relación, nos pusimos de novios y hablamos, de deporte, de sus tiempos, de los míos, de nuestras cosas, todas. Me dijo que lo iba a dejar por no aguantar el ritmo, de que si yo no hacia deporte iba a ser muy difícil, en fin, de que la relación no iba para ningún lado. Decidimos no adelantarnos y disfrutar el momento.Mi pensamiento era ¿Qué le pasa a este chico que no vamos ni una semana de noviazgo y ya quiere que lo deje?, le dije que si nos queríamos…íbamos a hacer que funcione.

Fuimos muy compatibles desde el principio en un montón de cosas…hasta que aparecía el deporte, y de nuevo nos separábamos. Pero todo estaba bien, yo lo quería e iba a aguantar lo que sea...estaba para apoyarlo. Siempre.